Durante las sesiones puede ocurrir algo que propicie un momento de aprendizaje. Por ejemplo, si los jugadores obtienen un buen resultado al haber trabajado juntos, el entrenador-educador puede querer parar la actividad para hacer que los jugadores hagan un círculo en el que debatir cómo el trabajo en equipo, la cooperación y la colaboración contribuyen al éxito. La situación se convierte en una lección sobre habilidades interpersonales. Más tarde, durante el círculo final, el debate puede centrarse en cómo pueden mejorar los jugadores el trabajo en equipo en la escuela, en casa o en sus comunidades.
